Formas de alquiler
¿Cuales son las diferencias del Renting frente al alquiler tradicional?
Actualmente no existe ninguna diferencia jurídica, pero sí las encontramos al analizar la demanda por parte del usuario.
El Renting es un alquiler concebido a medio y largo plazo, frente al corto plazo del alquiler tradicional. Es esta característica la que hace que los equipos del alquiler tradicional sean “usados” por diferentes titulares, mientras que en el renting es posible disfrutar de equipos nuevos.
¿Cuáles son las diferencias del Renting frente al Leasing?
El leasing es una fórmula utilizada para financiar la adquisición de equipos que requiere contratar otros servicios adicionales (mantenimiento, seguro…) a terceras compañías; sin embargo el renting es simplemente un servicio que permite la utilización de un bien sin involucrarse en el proceso de compra y, además, en la renta mensual se incluye, además de la utilización del equipo, su mantenimiento y seguro.
Es por ello que en el leasing la cuota mensual representa un servicio financiero y que su reflejo contable conlleve cierta complejidad (se suele reflejar como deuda a CP y LP con Entidades Financieras). Por el contrario, el renting destaca por su sencillez a la hora de contabilizarlo y, además, no se refleja en el pasivo.
¿Compra vs Renting?
La adquisición de un vehículo por Renting permite al usuario ahorrarse hasta un 10% del total de costes de un vehículo, fiscalmente es ventajoso para las empresas ya que no supone una inversión sino que se puede ir amortizando mes a mes.
Por otra parte cuentas siempre con la ventaja de tener un coche en perfectas condiciones y poder renovarlo periódicamente sin que esto suponga grandes sacrificios. A nivel particular el coche deja de convertirse en una fuente constante de gastos previstos o imprevistos, para pasar a tener un coste fijo.
Quizás el único inconveniente que se le pueda encontrar es que el coche no es tuyo, pero si tenemos
en cuenta que de esta manera siempre tendremos coche en perfectas condiciones, sin los “imrpevistos de un coche en propiedad, este deja de tener importancia.
¿Es preferible optar por el Renting o la adquisición del bien al contado?
La opción Renting es una alternativa cómoda para el usuario, ya que integra multitud de servicios necesarios, sea cual sea la opción elegida, en un solo contrato y con la garantía de una única compañía. Además, debido a su importante volumen de compra, Ibercaja Renting accede a precios especiales; lo cual repercute a los propios usuarios en el contrato de alquiler por Renting.
El usuario deberá valorar, además de todas las ventajas económicas, financieras y fiscales, las opciones del programa concreto de Renting elegido.
Por otra parte, el mantenimiento de los vehículos y del equipamiento es prestado por los servicios oficiales, lo cual garantiza que estén siempre a pleno rendimiento.
¿Qué diferencias hay entre el Renting y la compra al contado?
Son dos opciones antagónicas y por tanto difíciles de comparar. El concepto de propiedad, tan arraigado en el empresariado español, con todo lo que esto conlleva, está siendo desplazado cada vez más por un concepto más dinámico como es el alquiler.
Para diferenciarlas habrá que tener en cuenta que la compra persigue adquirir la propiedad del equipo y, por lo tanto, supone un incremento en el inmovilizado de la sociedad, estando siempre sujeto al calendario de amortización legal del equipo. Por su parte, es evidente que el renting no persigue la propiedad, sino el uso durante el periodo de duración del contrato, motivo por el no supone un incremento del inmovilizado y, además, se trata de un gasto deducible directamente de la cuenta de explotación
La pregunta final es ¿qué es más interesante?
Todo dependerá de varios factores:
- El tipo de bien que la empresa necesita.
- La vida útil estimada del bien y su valor residual.
- El horizonte temporal de la inversión.
- La percepción del riesgo de obsolescencia tecnológica, muy ligada al grado de aversión al riesgo que tiene el sujeto decisor.
- El grado de apalancamiento financiero que ya existe en la empresa.
- El coste de ambas fórmulas, fundamentalmente: el coste financiero, de mantenimiento, y seguros.
Como conclusión: en el mundo empresarial y en un entorno tan cambiante como el que vivimos, lamentablemente, no existen recetas mágicas. Como siempre, la clave del éxito en la decisión final dependerá de lo acertado del
planteamiento, de la oportunidad del mismo y de la visión de futuro.